A continuación os presentamos este clásico de la cocina norteamericana que ha vuelto a resurgir en destacados restaurantes y hoteles, donde lo flambean ante los comensales. A nosotros nos encantó su cremosidad… y que no haga falta pensar en un entrante, puesto que se trata de un plato muy completo.
Ingredientes para 4 personas:
- 4 filetes de ternera (preferiblemente solomillo o tapilla)
- 1 cebolla
- 1 cucharada de mostaza
- 1 vaso de nata líquida ligera
- Un chorrito de salsa Worcester
- Un chorrito de brandy
- 2 cucharadas de perejil picado
- Sal
- Pimienta
- 250 g de champiñones
- Mantequilla
- Aceite
- 100 g de guisantes
- 12-15 patatas nuevas
- 1 cucharada de romero picado
- 2 dientes de ajo
Elaboración:
- Pelamos las patatas y las cocemos en agua con sal. Escurrimos y reservamos.
- Cocemos los guisantes hasta que estén al dente y reservamos.
- Calentamos 2-3 cucharadas de aceite en una sartén, aplastamos los filetes con un rodillo, salpimentamos y los freímos rápido por ambos lados. Retiramos y reservamos.
- En la misma sartén freímos la cebolla en juliana y salpimentamos. Añadimos los champiñones, una cucharadita de mantequilla y un diente de ajo machacado. Agregamos un chorro de salsa Worcester y una cucharada de mostaza de Dijon. Echamos un chorro de brandy y flambeamos.
- Cuando el alcohol se haya evaporado, remover los jugos y agregamos la nata líquida y el perejil picado. Cocinamos, volvemos a incorporar los filetes y cocinamos un poco a fuego suave.
- En otra sartén calentamos 4-6 cucharadas de aceite y disponemos las patatas cortadas por la mitad y boca abajo. Espolvoreamos romero picado, un ajo machacado y sal y freímos por ambos lados hasta que estén doradas y crujientes en su exterior.
- Emplatamos: los filetes con la salsa por encima, las patatas a un lado regadas con un poco de su aceite y los guisantes al otro lado.
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