Un delicioso y completísimo postre o merienda especialmente indicado para la temporada de frío. Lógicamente, se puede tomar todo junto o hacer únicamente una de las dos recetas que la conforman, pero juntas son imbatibles. Como las natillas se toman frías, conviene prepararlas el día anterior.
Ingredientes para las natillas:
- 6 huevos
- 10 cucharadas soperas de azúcar
- 1 litro y cuarto de leche
- La corteza de 1 limón
- 1 cucharada sopera de maicena
Utensilios:
- Batidor de varillas para hacer el merengue
Elaboración:
- Hervimos la leche en un cazo junto con la corteza del limón lavado y reservamos cuando llegue a ebullición.
- En un bol aparte mezclamos las yemas con el azúcar y la maicena.
- Movemos esta mezcla con una cuchara de madera siempre hacia el mismo lado para que no se nos corte hasta formar una crema de color amarillo.
- Cogemos un cucharón de la leche caliente y lo echamos en esta crema amarilla. Lo mezclamos bien y vertemos esta mezcla en el cazo con el resto de la leche.
- Ponemos todo al fuego de nuevo y en cuanto hierva lo retiramos.
- Dejamos enfriar y guardamos en la nevera hasta consumirlo.
- Con las claras que nos han sobrado podemos hacer un merengue para adornar las natillas. Montamos las claras a punto de nieve con el batidor de varillas, y le añadimos 6 cucharadas soperas de azúcar, o al gusto, según lo queramos más o menos dulce.
Ingredientes para 4 manzanas asadas:
- 4 manzanas
- 4 cucharaditas de azúcar moreno
- 2 cucharaditas de canela
- 2 cucharadas de vino dulce
- Azúcar blanco para espolvorear
Utensilios:
- 1 molde apto para horno
Elaboración:
- Precalentamos el horno a 200° C.
- Lavamos y descorazonamos las manzanas. Cortamos un poco la base para igualar y que se mantengan de pie, y las ponemos en la bandeja de horno sobre papel vegetal
- En un bol mezclamos el azúcar moreno, la canela y el vino dulce y lo repartimos con una cuchara sobre las manzanas.
- Las asamos en el horno durante 25 minutos, sacándolas 5 minutos antes de que estén hechas para espolvorear azúcar blanco sobre ellas y las volvemos a meter en el horno para que se caramelice durante los últimos minutos.
- Se pueden tomar frías o calientes. Con natillas, como nosotros hemos hecho, o con helado de vainilla, por ejemplo.
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