De cara a estas fiestas y al frío invierno os presentamos con muchas ganas una receta realmente diferente y que sorprenderá y gustará mucho. Se trata de un plato de caza inglés que poca gente conoce. Nosotros le debemos la receta a nuestra buena amiga Rosie Buckman, de los Cotswolds. Ella tiene la costumbre de prepararla el día de Navidad, y nos imaginamos lo que debe de ser disfrutarla en un cottage de hace tres siglos al calor de una chimenea. ¡Esperamos vuestros comentarios!
Ingredientes para 6 personas:
Para el pastel:
- 2 o 3 faisanes (2 grandes de 900 g o 3 medianos de 700g)
- 1 l de caldo de pollo o faisán
- 300 ml de sidra (mejor seca)
- 2 hojas de laurel
- 5 ramas de tomillo
- 50 g de mantequilla
- 250 g de beicon picado
- 1 cebolla grande picada
- 250 g de champiñones
- 50 g de harina
- 200 g de castañas cocidas
Para el crumble:
- 50 g de copos de avena
- 150 g de harina
- 1 cucharada de tomillo
- 50 g de almendras y avellanas picadas
- 125 g de mantequilla en dados
Elaboración (ojo: se prepara en dos días distintos, con un proceso de congelación entre medias):
- En una cacerola grande disponemos los faisanes, el caldo, la sidra, el laurel y el tomillo y llevamos a ebullición. Después tapamos y cocinamos a fuego lento entre 45 y 60 minutos (según el tamaño de los faisanes). Dejamos enfriar, colamos y reservamos el caldo. Extraemos la carne de los faisanes con ayuda de un tenedor o con los dedos y los cortamos en trozos grandes.
- En otra cacerola más pequeña derretimos la mantequilla y añadimos el beicon, la cebolla y los champiñones y los sofreímos unos 10 minutos. Después agregamos la harina, moviendo sin parar, y cocinamos un minuto. Incorporamos las castañas y 300 ml del caldo reservado y cocinamos a fuego lento 3-4 minutos, moviendo, hasta que espese. Salpimentamos y añadimos la carne del faisán. Lo transferimos a una fuente de horno y dejamos que enfríe.
- Para preparar el crumble mezclamos en un bol la avena, la harina, el tomillo y los frutos secos, restregamos la mantequilla en la mezcla y vertemos todo sobre la fuente del faisán, ya enfriado, presionando suavemente. Cubrimos con dos capas de papel film y congelamos.
- Se puede descongelar en nevera durante 24 horas o a temperatura ambiente unas 8 horas.
- Una vez descongelado, lo asamos a 180° C durante alrededor de una hora (cubriendo con papel de plata hacia el final), hasta que esté dorado y burbujee.
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